A continuación a cronología de los títulos de Venezuela en la Serie del Caribe.
MAGALLANES, EL PRIMERO: En 1970 se dio inicio a una nueva etapa en la Serie del Caribe con la exclusión de Cuba y Panamá. Caracas fue la sede y contó con la participación de Tigres de Licey, Leones de Ponce y Navegantes del Magallanes. A pesar que la nave no era favorita y luego de 12 fracasos, Venezuela consigue su primer título caribeño. El conjunto eléctrico fue conducido por Carlos "Patato" Pascual (foto), quien contó con el aporte ofensivo de Gonzalo Márquez (líder bate de la serie) y con el hermético pitcheo de Aurelio Monteagudo (Jugador Más Valioso) y Orlando Peña. El balance final fue de 7-1.
LOS TURCOS OTRA VEZ: El segundo título para Venezuela en una justa caribeña lo consiguió el Magallanes en San Juan de Puerto Rico en 1979. Bajo la dirección de Willie Horton, apodado "El Brujo" (foto), la nave llegó a la isla inspirada. A pesar de caer el día inaugural por la mínima (1-0) frente a las Águilas del Cibao, se repusieron con dos victorias aplastantes ante Puerto Rico (11-0) y México (8-0). Los turcos se llevaron la revancha ante Dominicana (2-1) en diez entradas y finalmente Michael Page ligó jonrón de tres carreras ante México en el noveno inning del último juego de la serie para asegurar el gallardete.
LEONES CON EL TRABUCO: Quizás el título más emocionante que ha obtenido Venezuela en una justa caribeña, lo consiguieron los Leones del Caracas en 1982 cuando viajaron a Hermosillo, México, encabezados por el emblemático Alfonso "Chico" Carrasquel, quien se convirtió en el primer mánager venezolano en alcanzar la hazaña. Los melenudos mostraron en todo momento un extraordinario trabajo colectivo y deseo de triunfo en cada uno de los integrantes del equipo. Baudilio Díaz fue el Jugador Más Valioso (campeón bate y jonronero), mientras que Antonio Armas lideró los empujadores. El récord fue de 5-1.
ÁGUILAS ANTE TODO PRONÓSTICO: No estaban entre los favoritos. Ni de cerca. No obstante, la gallardía y la sed de triunfo de los aguiluchos pudo más en su año debut en una Serie del Caribe. La cita fue en Mazatlán, México, en 1984. El factor pitcheo y el juego pequeño fueron determinantes en la conquista. Rubén Amaro fue el mánager campeón y Leonel Carrión (foto) cargo con el peso ofensivo, junto a Luis Salazar, Terry Francona (Jugador Más Valioso), Jerry White y Juan Bustabad. Finalizaron con 5-1. La única derrota fue ante México en el último encuentro de Venezuela en la serie, después de 13 candentes episodios.
AGUILUCHOS DE 2-2: Las Águilas del Zulia conquistaron su segunda corona en igual número de asistencias. Mazatlán, México, fue la sede en 1989 en medio de una enorme crisis económica que puso en peligro la continuidad de la serie. El conjunto venezolano se apoyó en la profundidad de sus importados, entre ellos, los lanzadores Len Damian y Dale Polley y los bateadores Joe Girardi y Phil Sthephenson. Brillaron Carlos Quintana y Wilson Álvarez. Además, contó con el efectivo aporte de los refuerzos de lujo de los Tiburones de La Guaira, Carlos Martínez, Norman Carrasco y Gustavo Polidor. Los rapaces finalizaron con 5-1.
CAMPEONES INVICTOS: En el último encuentro de la Serie del Caribe del 2006, jugado en el estadio José Pérez Colmenares de Maracay, los Leones del Caracas vencieron 5 a 4 a los Tigres de Licey de la República Dominicana para alcanzar una nueva corona para el país después de 17 años. Ramón Hernández (Jugador Más Valioso) fue figura determinante en un conjunto melenudo que brilló por su entrega y gallardía. El segundo título en la historia para el Caracas arrojó dos notables curiosidades: Primer conjunto criollo que termina invicto (6-0) y Carlos Subero se convirtió en el mánager más joven en alcanzar la corona del Caribe.
PREMIO A LA CONSISTENCIA: Los Tigres de Aragua consiguieron su primera Serie del Caribe en el 2009 luego de siete fallidas participaciones. Bajo el mando de Buddy Bailey, los bengalíes viajaron a Mexicali, México, alcanzando la corona después de vencer 5-3 a Venados de Mazatlán en la penúltima jornada del torneo. El pitcheo, especialmente el relevo, fue factor clave en los felinos. La principal figura fue el taponero Francisco Butto, quien fijó un nuevo récord para la Serie del Caribe con cuatro rescates y el récord de más salvados en la historia del torneo con seis, para convertirse en el Jugador Más Valioso.
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